La Comisión Europea (CE) ha asegurado hoy que Facebook le ha confirmado la filtración de datos de 2,7 millones de ciudadanos de la Unión Europea (UE) a Cambridge Analytica y que el consejero delegado de la empresa, Mark Zuckerberg, llamará "a principios de la próxima semana" a la comisaria europea de Justicia, Vera Jourová, para tratar este asunto. De ellos, casi 140.000 afectados estarían ubicados en España.
"Facebook también explicó qué medidas ha tomado para reaccionar ante esta situación", aseguró en una rueda de prensa el portavoz de Justicia de la CE, Christian Wigand, quien confirmó que la empresa tecnológica respondió ayer por la tarde a la carta enviada por Jourová la semana pasada.
El portavoz señaló que el contenido de la misiva "todavía está siendo analizado", aunque "está claro que será necesario seguir discutiendo sobre las medidas a tomar" en el marco del nuevo Reglamento General de la Protección de Datos (RGPD) comunitario, que comenzará a aplicarse el próximo 25 de mayo.
La comisaria de Justicia ha explicado que se reunió ayer con representantes de la Oficina del Comisionado de Información (ICO) británica y con la responsable del Grupo de trabajo del artículo 29 (relativo a la Protección de Datos), Andrea Jelinek.
Además, ha explicado que las autoridades europeas de Protección de Datos han introducido también la filtración de datos de Facebook a Cambridge Analytica en la agenda de su reunión del próximo martes, según confirmó el portavoz de justicia de la CE. El gigante tecnológico estadounidense informará a los usuarios cuyos datos hayan sido compartidos con Cambridge Analytica de qué información se ha filtrado.
El Reglamento General de Protección de Datos que empezará a aplicarse en toda la UE el próximo 25 de mayo incluirá, entre otras medidas, la obligación de informar en 72 horas a los usuarios cuya información personal haya sido objeto de cualquier tipo de filtración.
Facebook confirmó el pasado miércoles que la consultora británica Cambridge Analytica accedió a los datos de 87 millones de usuarios (la mayoría de Estados Unidos) en todo el mundo, 37 más de los que habían calculado en su respuesta inicial a la polémica filtración de datos.